¿Te animás a ser anfitriona de una fiesta? No tiene por qué ser un fiestón y tampoco hace falta que financies los aperitivos. El plan pasa por poner en práctica algunos de los aprendizajes de este año: tomarte un tiempo para el disfrute, elegir con quién lo querés compartir, disfrutarlo con los cinco sentidos, dejarle algo al Universo, actualizar el entorno, habitar el presente, embellecer lo posible y develar tu poder de anfitriona-artista. Planificarlo y vivirlo desde este lugar, con generosidad y alegría: ese es el desafío.
Te dejo consejos para planificar la barra, creados por @fedecuco para el libro Bartender de Entrecasa, nuestro manual ilustrado de coctelería para anfitriones exigentes.